Semla... Qué bonito suena,
mejor sabe... incluso en plural, los semlor acaban de convertirse en
pasión y es a causa de “Bake the World” porque, si no por
su propuesta para este mes de marzo, a saber cuándo se me habría
ocurrido prepararlos, pero claro, vienen que ni pintados después de
no poder llegar al reto de los Pretzel del mes pasado y justo justo
justo cuando comienza la Cuaresma, que no será porque no tengamos
cosillas propias para estos tiempos, pero no está nada mal ir
probando otras para ampliar las posibilidades de disfrutar con la
elaboración -que se disfruta- y con la degustación, que eso ya es
el no va más. Además, este mes sortearán el libro de Ibán
Yarza “Pan casero”, así que si no era suficiente con el
saborear un semla -o dos, o más- para animarse a participar, nos
tientan con este super regalo, como para no intentarlo ¿no?
Bueno, pues tras esta palabrería habrá
que contar también que son unos pastelillos aromatizados con
cardamomo, primos del brioche y con un relleno de crema de almendra y
nata montada, que son típicos en Suecia (y en algún país más del
extremo septentrional de nuestro continente), que tradicionalmente se
toman el martes de Carnaval, justo antes de comenzar la Cuaresma,
aunque al parecer ahora en el país de origen se encuentran en las
pastelerías desde Navidad hasta la Semana Santa (e inluso durante el
resto del año) pues los semlor gozan de una gran popularidad.
Y bien, ahora toca ponerse en harinas y
encender el horno. Para la receta que traigo he seguido las
indicaciones de Kristin Ehrenborg, que tiene una web con su
nombre dedicada a pasteles y pan caseros que recomiendo no perderse y
seguir con atención pues es una maravilla en cuanto a recetas,
fotografía e “investigación” (con adaptaciones para
intolerancias y alergias). Los semlor que propone están deliciosos y
yo me he decantado por una versión integral, menos refinada, con una
potenciación de sabores y texturas y la verdad es que no hemos
podido esperar a la hora de la merienda... seguro que os pasa lo
mismo en cuanto empecéis a sentir su aroma por toda la casa.
Vamos a por ellos.
Vamos a por ellos.
Ingredientes:
Para la masa de los bollos:
25g de levadura fresca
50g de margarina
150 ml de leche de soja
40g de azúcar moreno
1 pizca de sal
300g de harina integral de espelta
1 cucharita de semillas de cardamomo
picadas o molidas
Un poco de leche de soja para pintar
2 cucharadas de azúcar moreno
2 cucharaditas de canela
Azúcar moreno glas para decorar
Para el relleno:
100g de almendras molidas
100g de azúcar moreno glas
6 cucharadas de agua mineral o filtrada
(o la suficiente para hacer cremosa la masa)
15o ml de nata de soja o avena para
montar.
En un cuenco o bol grande desmigamos
con los dedos la levadura fresca.
Fundimos la margarina, añadimos la
leches y la llevamos a una temperatura de 38º. Vertemos sobre la
levadura y agregamos el azúcar, la sal, el cardamomo y la harina.
Amasamos un buen rato, un mínimo de 10 minutos y cuando ya esté
bien la masa cubrimos el bol con un paño y dejamos fermentar un
mínimo de 30 minutos, hasta que aumente el dobre su tamaño.
Amasamos bien de nuevo y dividimos la
masa en diez porciones, con cada una de las cuales formamos un bollo,
y los vamos colocando en una bandeja de hormo cubierta con papel de
hornear. Cubrimos con un paño y dejamos fermentar de nuevo en lugar
cálido hasta que doblen su volumen.
Precalentamos el horno a 225ºC.
Cuando los bollos ya hayan fermentado
pintamos su superficie con un poco de leche y repartimos por encima
la mezcla de azúcar y canela. Horneamos hasta que estén dorados,
unos 15 o 20 minutos (depende de cada horno) y cuando los saquemos
los ponemos a enfriar con un paño por debajo y otro por encima, buen
cubiertos.
Una vez fríos preparamos el relleno: Mezclamos en un bol la almendra molida, el azúcar glas y el agua. Cortamos a los bollos un tape por la parte superior y vaciamos parte de la miga, que desmenuzaremos y añadiremos a la masa de almendra. Con esa masa, que ha de tener una consistencia cremosa, rellenamos los bollos. Montamos la nata con un poco de asúcar glas (al gusto) y cubrimos los bollos, coronando con el tape que habíamos cortado. Espolvoreamos con azúcar glas y servimos.
Se pueden comer así, tal cual, pero en
Suecia lo “apropiado” es tomarlos sumergiéndolos en un tazón de
leche caliente. Son una delicia los toméis como los toméis. ¡A
disfrutarlos!
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Preciosos, te han quedado y una idea fantástica utilizar esa harina, la probaremos.
ResponderEliminarA nosotras nos han encantado, hasta el punto que ya estamos pensando en repetir!!!
besos
Unas fotos preciosas!!! Ha sido un placer preparar Semlor. Me guardé 3 en el congelador y espero al finde para tomarlos bañados en un plato con leche como se acostumbra... Menudo festival!!! Nos encontramos en el próximo reto panarra.. Besoss,
ResponderEliminarQue dos enlaces mas interesantes y que fotos de venenitos en ellos.
ResponderEliminarGracias,
Miguel.
La verdad ea que han sido todo un descubrimiento, están buenísimos y te han quedado fenomenal. Me encanta tu mantel de azúcar glass, queda precioso en la foto.
ResponderEliminarBesitos
Te han quedado estupendos, la presentación me encanta y con harina de espelta seguro que tienen su punto diferenciador, a nosotros nos han gustado mucho pero nos han resultado contundentes.
ResponderEliminarSaludos panarras ;)
Estoy con Sara en que han sido todo un descubrimiento así que en cuanto tenga la siguiente hornada haré como Joaquina, que para algo tenemos el congelador, jejejeje... Y os animo a que probéis con la harina de espelta, les da un toque 'rústico' que me encanta. Qué razón tienes José, somos todos unos panarras de primera ;-)
ResponderEliminarSaludos a todos y gracias por visitarme
Besos
Cati
¡Qué pena que no llegases a los pretzel! Algún día tienes que prepararlos igualmente, ¡son geniales y muy sencillos de hacer!
ResponderEliminarPero bueno, este es un pan que, aunque muy distinto a los pretzel, tiene algo en común, ¡¡es altamente adictivo!!
Me enantan los semla. Qué envidia verlos a través de la pantalla, jajajaja
Ahora mismo echo un vistazo al blog que comentas, solo con tu presentación, suena útil ;)
Un besito!
Claro que haré los pretzel Paula... en las dos versiones además (tierna y crujiente) porque a mi alrededor hay fans para todos los gustos ;-)
ResponderEliminarUn Beso!
Han sido un verdadero descubrimiento. Con lo que nos gusta el cardamomo en casa, ni la gata se ha resistido a rebañar las migas de la mesa!!!
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